En el corazón de los Valles Calchaquíes, abrazado por montañas y un cielo inmenso, se encuentra Molinos, un pequeño pueblo salteño a orilla de la Ruta 40 que parece suspendido en el tiempo. Molinos conserva intacta la esencia colonial que lo convierte en un lugar profundamente auténtico. Es maravilloso ver esas casas de adobe con puertas de esquina, sin ochava, con un ángulo recto y dos puertas de madera a cada lado de una columna esquinera; casi ya no existen en el noroeste argentino.

Allí se respira historia. La iglesia de San Pedro Nolasco, construida en el siglo XVIII,  y campanario sencillo, es una joya de la arquitectura colonial del norte argentino. Frente a ella, la antigua casa del último gobernador español del Tucumán, Nicolás Severo de Isasmendi, hoy convertida en hospedaje.

Y en medio de esta postal viva, te espera Hostal Cardones, Miriam, nuestra amiga, una anfitriona que abre las puertas como quien abre el corazón, tiene la amabilidad tranquila de su gente. Es un lugar donde el tiempo no corre, sino que camina despacio, invitando a los visitantes a detenerse, a mirar y sobre todo a sentir…

 

 

Molinos enamora con su simpleza, con su verdad intacta. Es uno de esos lugares que no se olvidan…Nos fuimos para seguir camino, retomamos la 40, con la sensación de que dejábamos atrás un lugar al que siempre se quiere volver…

GALERIA

 

UBICACIÓN:

Contacto: Cardones de Molinos Hostal: 387 – 408-1724 (Miriam)

 

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